Cocinar con una placa de inducción puede ser todo un descubrimiento, después de estar acostumbrado a utilizar la vitrocerámica, e incluso un reto si estabas habituado a la cocina de gas con la llama a la vista.
Siempre da un poco de respeto cuando empiezas con algo nuevo, pero merece la pena utilizar la inducción porque todo son ventajas. De todas formas, para que te sea mucho más fácil la adaptación, te detallo más adelante algunos trucos y consejos para cocinar con una placa de inducción.
Diferencias entre una inducción y el resto de placas para cocinar
Antes de enumerar trucos, veo imprescindible explicarte qué diferencias existen entre una placa de inducción, una placa vitrocerámica o las placas de gas butano.
Con respecto a las placas de gas las diferencias son más que evidentes, no se parecen en nada a las placas de vitrocerámica o inducción visualmente hablando. En una placa de de vitrocerámica, la superficie es lisa y plana, cubierta por una lámina de cristal vitrocerámico de calidad para soportar golpes, arañazos y derrames de líquidos. Más práctica para limpiar y cómoda para cocinar.
La diferencia más importante entre una placa vitrocerámica y de inducción, es que la vitrocerámica mantiene por más tiempo el calor después incluso de apagarla, con el consiguiente riesgo de quemarse sin darse cuenta. Por el contrario, la inducción genera calor al recipiente y no a la superficie, así se calienta más rápido y ahorra por tanto energía.
Cómo funciona la inducción?
Las placas de inducción generan campos electromagnéticos que fluyen en una sola dirección, sólo al recipiente donde se cocina la comida sin calentar el cristal vitrocerámico. Por tanto, la inducción calienta rápido y al terminar no queda calor residual, es limpia, práctica y más eficiente que el resto de placas.
Mención aparte la seguridad que proporcionan, ya que cuentan con un sistema de bloqueo para que los más pequeños no la enciendan y además, el fuego no se calienta o incluso se apaga si no detectan un recipiente sobre ella.
Trucos para cocinar con una placa de inducción
- Es posible que tu batería de cocina o sartenes no sean aptas para inducción, ya que es necesario que tengan un recubrimiento de metal ferromagnético para que hagan contacto con la placa. Por tanto, un truco es comprar un adaptador o difusor de inducción, si no quieres renovar toda tu batería!
- Cocinar con inducción es muy saludable, ya que son muy precisas y estables en el control de temperaturas. Si compras, además, una sartén de calidad no calentarás en exceso el aceite o la sartén en sí, lo cual es muy importante para mantener las propiedades intactas del aceite o la comida en general.
- Coloca siempre el recipiente justo encima de la zona de cocción y del mismo tamaño, para un cocinado uniforme y eficiente.
- La alta eficiencia en la transferencia de calor de la inducción hace que cocines más rápido, así que tendrás la comida lista en un momento. No uses por tanto, recipientes con la base dañada, doblada o curvada.
- Las placas de inducción más modernas disponen de una función de potencia (P), para aumentar la potencia de una sola zona de cocción permitiendo así obtener un calor rápido e intenso. No dudes en utilizarla, para una fritura de calidad, sellar carne o simplemente hervir agua.
- Los derrames de líquidos o restos adheridos de alimentos se limpian fácilmente con un paño humedecido porque no se queman en la superficie.
- Un truco sencillo y efectivo para desperdiciar solo la energía justa, es utilizar la función pausa unos minutos antes de terminar el cocinado. Esta función mantendrá el calor a una temperatura baja y constante, que terminará de cocer la comida sin necesidad de encender de nuevo la placa. Eso sí, acuérdate de apagar del todo cuando acabes!
- Otra opción muy interesante que la inducción suele tener es temporizador individual, para controlar la cocción de cada zona por separado.
- La función puente permite unir dos zonas de cocción y crear una más amplia para utilizar distintas ollas o recipientes más grandes. Para cocinar en olla exprés, por ejemplo, es muy útil.
Cocinar todo tipo de alimentos es posible en la inducción, solo variará el tiempo de cocción que como todo es práctica, igual que sucede cuando cocinas con otra tecnología como horno, microondas.. etc. Así como dependerá también el tipo de menaje que utilices, como una olla exprés, ultrarrápida o convencional, batería de cocina de acero inoxidable o cazuelas de barro (que puedes usar colocando un difusor de inducción) etc. . ya que el calor se transmite de manera distinta.
Y tú, ¿tienes algún truco o consejo útil para cocinar con la placa de inducción? A qué esperas para contarlo en los comentarios! 😀
Deja una respuesta